Tal y como señaló a Maxillaris el doctor Antonio Montero, presidente del COEM, al finalizar la cita, “nuestro balance es tremendamente positivo porque hemos cumplido con las expectativas. Tanto en el programa principal como en el de eventos paralelos hemos contado con conferencias magníficas, todos los ponentes han estado a la altura de lo esperado y todo ello ha hecho que la afluencia de la gente haya sido la esperada, superando las 2.000 personas y teniendo que cerrar las inscripciones. Todo nuestro trabajo es en beneficio del colegiado y estamos muy contentos de que se haya podido aprovechar”. En este mismo sentido se manifestó el doctor Jiménez, responsable del certamen, quien detalló los tres retos que se propuso el comité organizador: “básicamente nos planteamos tres metas: que los recursos audiovisuales funcionaran bien, que las conferencias fueran de un nivel científico excelente y que el colegiado pudiera disfrutar de las ventajas de tener un completo programa interdisciplinar a un precio muy económico”.
Para mostrar lo último de la Odontología, la organización diseñó un programa principal compuesto por ocho reconocidos profesionales que desarrollaron cada uno de ellos una conferencia destinada a dentistas especialistas y otra más enfocada a generalistas. Así, participaron los doctores William Arnett, Federico Ferraris, Giovanni Zuccheli, Stéphane Simon, Ove Peters, Nelson Silva, Christian Coachman y Henry Salama –quien en el último momento tuvo que sustituir a su hermano, el doctor Maurice Salama, por indisposición de éste–.
La estructura de dividir el programa en dos vertientes es ya clásica en el congreso del COEM y, según los organizadores, tiene grandes ventajas. Tal y como apuntó el doctor Jaime Jiménez, “este formato permite que tanto la gente más joven como los profesionales generalistas tengan acceso a conferencias adaptadas a su práctica y sus conocimientos, pero a la vez también incluimos temas más concretos y complejos para los dentistas especialistas. Con todo ello reflejamos en el congreso lo que es la profesión en estos momentos”.
En el encuentro se abordaron cuestiones como la estética facial y la ortodoncia, la endodoncia regenerativa, las técnicas periodontales en el sector anterior, la implantología estética, las recesiones en dientes e implantes, los composites versus cerámicas, la innovación con Digital Smile Design o los criterios de selección para diferentes restauraciones y materiales. Gracias a todas estas temáticas, se pudo obtener una visión muy detallada de cómo ha evolucionado en los últimos tiempos la ciencia odontológica, pero también de cómo la tecnología (impresiones 3D, fotografía digital, cirugía guiada o CAD-CAM) ha favorecido la mejora de los tratamientos.
Más allá de la ciencia
Por su parte, en la sala dedicada a eventos paralelos participaron profesionales de la talla de los doctores Julia García Baeza, Ignacio Hernández Medrano, David Herrera, Rocío Cerero, Ángel Alcaide o Miguel Carasol, que desarrollaron temáticas como la disyuntiva ente los alineadores y los brackets, el tratamiento de pacientes con anorexia y bulimia, las lesiones orales, la sedación consciente inhalatoria o cómo abordar la caries. Junto a lo anterior, la organización programó una sala de talleres donde los asistentes pudieron practicar con equipos de última generación.
A toda esta oferta científica también habría que sumar el programa precongreso que se desarrolló en la sede del COEM el día 9. En él participaron los doctores Ignacio Sanz, Arturo Llobell, Bruno Pereira, Francisco Teixeira y Nicolas Elian.
En el plano más institucional, el congreso contó para su inauguración con Marta Sánchez-Celaya, gerente asistencial de Atención Primaria así como responsable del Plan de Salud Bu­­codental de la Comunidad de Madrid, quien estuvo acompañada en su intervención por los doctores Antonio Montero y Jaime Jiménez. Según afirmó Sánchez-Celaya, “desde la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid se es consciente de que la Odontología es una parte fundamental de la Sanidad y de que los dentistas y demás profesionales del sector dental contribuyen, de manera relevante, al bienestar de las personas”. En su discurso, además de felicitar a los organizadores por el nivel del congreso, Sánchez-Celaya aprovechó también para asegurar que la Comunidad de Madrid está trabajando para incrementar la asistencia dental a niños y discapacitados, haciendo especial énfasis en el Plan de Atención Dental Infantil (PADI) que pronto se pondrá en marcha y en el que el papel del COEM ha sido decisivo.
Además de la vertiente científica, el Congreso Bienal del COEM también sirvió para reflejar el compromiso social de la organización colegial, que se manifestó a través de la participación de la Fundación Aladina y la proyección de la película “Lo que la verdad importa”. El doctor Antonio Montero subrayó en este sentido que “en los últimos meses se han firmado diferentes acuerdos con organizaciones sociales para promover la lucha contra distintas enfermedades, como el cáncer infantil”.
Para clausurar el congreso, la organización recurrió a Elsa Punset, quien desarrolló una interesante conferencia sobre inteligencia emocional y métodos de mejora de vida.
En la zona de exposición comercial, el congreso contó con cerca de 50 firmas de la industria dental, lo que fue muy valorado tanto por el presidente del congreso como por el máximo responsable colegial. “La respuesta de las empresas ha sido impresionante y desde aquí tenemos que agradecerles su esfuerzo”, señaló el doctor Jiménez. Según indicó el doctor Montero, el certamen no ha supuesto un ingreso extra para el colegio, pero tampoco un gasto: “Nunca la intención del colegio ha sido ganar dinero con el congreso. Gracias a la buena gestión del equipo, la aportación de las casas comerciales y las inscripciones, hemos conseguido tener unos ingresos superiores a 250.000 euros, que es prácticamente lo mismo que ha costado su organización”.
Una vez finalizada la tercera edición, el COEM ya piensa en la cuarta, que será dentro de dos años, un plazo adecuado para analizar lo conseguido y agradecer el esfuerzo de mucha gente. Como detalló el doctor Jiménez, “El trabajo de todo el equipo organizador ha sido enorme en los últimos meses, pero personalmente me gustaría agradecer el apoyo de tres personas fundamentales: el doctor Montero; el presidente de la Comisión Científica del COEM, el doctor Eugenio Grano de Oro, y  la doctora Marisol Ucha, que ha hecho un trabajo impresionante en las sesiones paralelas y nos ha dado un gran apoyo”.